La funcionaria asumiría a partir del 10 de diciembre, cuando la actual ministra de Seguridad asuma su banca en el Senado. Sus antecedentes, su participación en el paro policial en 2013, su experiencia en Colombia y El Salvador, y un perfil completo.
Alejandra Monteoliva será la ministra de Seguridad que reemplazara en funciones a Patricia Bullrich, cuando el 10 de diciembre se realice la asunción de autoridades en el Senado.
Monteoliva es cordobesa y es un nombre reconocido en la Provincia por su participación en el paro policial y acuartelamiento de efectivos del 2013, cuando los saqueos, robos, linchamientos entre vecinos a presuntos delincuentes, y otras miles de escenas de violencia, se reprodujeron por todo el territorio de Córdoba.
En aquel momento, la futura ministra era la encargada del ministerio de Seguridad de Córdoba designada por José Manuel De La Sota en septiembre de 2013. Reemplazó en funciones al ex Jefe de la Policía y también ex ministro de Seguridad, Alejo Paredes, quien se vio involucrado en el «narcoescándalo» que destapó una trama de corrupción en la estructura policial.
Un informante de la Policía declaró ante la prensa el rol que cumplía para una banda de efectivos de la fuerza que se quedaba con estupefacientes y dinero que secuestraban en allanamientos para su posterior comercialización. En el medio, uno de los policías implicados, Juan Alós, apareció muerto de un balazo en la cabeza el 7 de septiembre de 2013, por lo que Paredes tuvo que dejar su puesto, que luego asumiría Monteoliva.
En ese proceso la Policía de Córdoba estaba totalmente deslegitimida, pero sus efectivos reclamaron por sus salarios. Pese a que no tienen la potestad para realizar huelgas, el acuartelamiento policial se dio en diciembre de 2013 o que culminó con un caos social que tuvo el saldo de cientos de saqueos, violencia civil, e incluso, dos muertos. En ese mismo diciembre, Monteoliva renunció a su cargo.
La cordobesa acompaña a Patricia Bullrich desde hace 10 años, siguiendo su política contra el narcotráfico y las organizaciones terroristas/criminales. Incluso fue parte del gobierno de Juntos por el Cambio ya que entre 2015 y 2020 fue Directora Nacional de Gestión de Información Criminal, primero, y como Directora de Operaciones de las Fuerzas Federales, luego. Desde junio del año pasado, se desempeñaba como secretaria de Seguridad de la Nación.
En un comunicado que difundió el equipo de prensa de la ministra, destacaron que Alejandra Monteoliva es discípula del General Óscar Naranjo, comandante de la Policía durante el gobierno del ex presidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez y ex vicepresidente (2017-2018) del entonces mandatario de ese país, Juan Manuel Santos.
Trabajó como asesora en temas de seguridad en Honduras y El Salvador; allí participó de la creación e implementación del «modelo Bukele».
Es egresada de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Católica de Córdoba, magister en Planificación y Administración del Desarrollo Regional del Centro Interdisciplinario de Estudios Regionales (CIDER) de la Universidad de los Andes, Bogotá, Colombia.
Además docente‐investigadora en el área de Gobierno, Gestión y Políticas Públicas en diferentes universidades de América Latina. Fue directora de la Carrera de Ciencia Política, Directora de la Especialización en Gobierno y Gestión Pública y Coordinó el Centro de Estudios en Gobernabilidad Local de la Pontificia Universidad Javeriana en Colombia.
Se desempeñó como consultora internacional para organismos multilaterales y asesora de gobiernos en materia de políticas públicas, gestión del desarrollo y seguridad ciudadana.
También en el 2012, fue Directora de Planificación y Capacitación del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Córdoba. Y lo mismo hizo en la provincia de Misiones, en el Ministerio de Gobierno, como consultora externa en Seguridad y Convivencia Ciudadana (junio‐octubre 2012).
La aparición pública reciente más destacada de Alejandra Monteoliva va a tono con lo que se espera de su visión como ministra: en septiembre del año pasado, la Secretaria habló en los medios en defensa del personal policial que gaseó con gas pimienta a corta distancia a una niña de 10 años y a su madre, quienes se encontraban sentadas en la vereda en una manifestación por los jubilados.
:::Ramiro Quintanilla (El Resaltador-Córdoba):::